Los motores de explosión que lleva la mayor
parte de los vehículos automóviles, generan gran cantidad de calor que hay que
disipar. Casi la totalidad de los motores modernos están equipados con un
circuito de refrigeración, cuyo componente fundamental es el radiador,
inventado en 1897 por Wilhelm Maybach y mejorado por Samuel Brown.
Un caloportador circula por el bloque del
motor y por la culata, por las zonas más cercanas a la producción de calor
(donde se produce la ignición del combustible) para mantener a una temperatura
adecuada el cuerpo del motor (entre 75 y 95 oC ). Este caloportador se mueve
gracias a una bomba centrífuga desde el bloque al radiador, generalmente
montado en la parte frontal del vehículo, para trasferir la energía sobrante al
aire ambiente. |